Según la Unión Europea, más del 70% de la basura que acaba en nuestros mares y océanos corresponde a envases de un solo uso como botellas de agua, bolsas de la compra o envoltorios de comida; y las soluciones que están disponibles ahora mismo no ayudan a los consumidores ni al planeta.
Sustituir los envases de usar y tirar por la reutilización de envases es una de las soluciones reales y factibles para combatir la contaminación que daña nuestros océanos.