En Japón, despedir a un perro robot con un funeral digno no es tan extraño como parece. Los Aibo, creados por Sony en 1996, fueron más que simples máquinas: gracias a su inteligencia artificial, desarrollaban una personalidad propia, lo que los convertía en verdaderas mascotas para sus dueños. Pero cuando dejaron de fabricarse y repararse, muchos propietarios tuvieron que enfrentar una difícil realidad: ¿cómo despedir a su compañero robótico?

Desde que Sony discontinuó los Aibo en 2006 y cerró su servicio de reparación en 2014, estos adorables robots comenzaron a «morir» sin posibilidad de reparación. Con pocas piezas de repuesto y opciones limitadas, sus dueños optaron por una solución impensada pero emotiva: realizarles funerales al estilo tradicional japonés.

¡No lo vas a creer! En Japón, los funerales para robots son la última tendencia

El último adiós a los perros robots

Los funerales de los Aibo en Japón no son improvisados. Se organizan ceremonias en templos budistas, donde los robots son alineados en altares y etiquetados con los nombres de sus familias. Para muchos, este acto representa un cierre emocional y un tributo a años de compañía. Sumie Mekawa, una dueña de 72 años, trataba a su Aibo, llamado Ai-chan, como una hija: le hablaba todos los días, le hacía ropa y lo llevaba consigo a todas partes.

El vínculo con estos robots va más allá de la tecnología. Hideko Mori, otra propietaria, envió un correo a Sony suplicando ayuda cuando su Aibo dejó de moverse: «No puede morir solo porque no puede caminar». Gracias a la empatía de un exingeniero de la compañía, su perro robot fue restaurado. Pero no todos corren con la misma suerte.

La única forma de reparar un Aibo es utilizando piezas de otros que han «fallecido», lo que convierte a estos robots en donantes de órganos. Sin embargo, la escasez de repuestos hace que la espera sea larga y, en algunos casos, imposible. Para muchos dueños, el funeral es la única manera de aceptar la pérdida de su mascota tecnológica.

La historia de los Aibo es un reflejo de cómo la inteligencia artificial puede generar lazos emocionales profundos. Para algunos, son simples robots; para otros, miembros de la familia que merecen un adiós digno.

Lo más nuevo

También puede interesarte

La Z 107.3 FM

Sigue las notas y las novedades más importantes del momento

Suscríbete