La hermana Rebecca Frick, miembro de la orden de las Hermanas de San Vicente de Paúl en Perú, viajó a bordo de un tractor por el pueblo para desinfectar las calle y evitar la propagación del coronavirus.

La monja utilizó hipoclorito de sodio y alquiló una fumigadora con capacidad para 1.200 litros que enganchó al tractor.

Hasta el momento, en esa localidad no se ha registrado ningún caso de la enfermedad.