- Comer o beber muy rápido o en exceso
- Nerviosismo o ansiedad
- Consumir alimentos irritantes
- Abusar de bebidas alcohólicas o carbonatadas
- Fumar en exceso
- Tomar algún líquido viendo hacia abajo
- Poner azúcar debajo de la lengua
- Aguantar la respiración o hacerlo en una bolsa de papel
- Acostarse y llevar las rodillas al pecho o el típico susto son algunas de ellas
- Detengas al bebé si está comiendo muy rápido
- Colocar al bebé en posición vertical después de comer para que elimine el aire fácilmente