En el Día Internacional de la Mujer la presencia del color morado es fundamental.
Existen diversas historias, aquí te presentamos las más destacadas.
El uso del color morado se remonta a la Inglaterra, en el año 1908, la Unión Política y Social de Mujeres se representó los colores morado, blanco y verde como símbolo de lucha.
“El violeta, el color de los soberanos, simboliza la sangre real que corre por las venas de cada sufragista, simboliza su conciencia de libertad y dignidad. El blanco simboliza la honradez en las vidas privada y política. Y el verde simboliza la esperanza por un nuevo comienzo”, comentó Emmeline Pethick-Lawrence, destacada activista de la época.
Se dice que en 1910, durante la segunda asamblea internacional de mujeres socialistas, donde Clara Zetkin, se convirtió en la primera representante de la lucha por la igualdad de género, propuso que cada 8 de marzo se recordara a la sociedad las demandas que quedaron pendientes con las 123 trabajadoras textiles de Estados Unidos.
Las mujeres protestaron al encerrarse al interior del inmueble, pero fueron asesinadas por un incendio provocado.
Tras el incendio, testigos indicaron que el humo del incendio se podía ver a kilómetros, y era de un color violeta ya que estaban confeccionando prendas con telas de ese tono.
Otra teoría, es que al mezclar el color azul y el rosa, da morado y este representa un ideal de igualdad, históricamente relacionados al género masculino y femenino.